Por Chuck Todd, NBC News:
Estamos llegando peligrosamente cerca del momento en el que podría ser justo decir, "Descarta todo lo que creías saber sobre esta elección".
Estamos pasando de una campaña presidencial que dejó al público desinteresado y, a veces, disgustado, a una campaña que podría generar un electorado tan interesado, si no más, como en 2008 y 2020, dos de las elecciones con mayor participación de los últimos 50 años.
Si los Demócratas terminan teniendo un nuevo candidato - y parece cada vez más probable hora tras hora que así será - eso también es probable que de repente genere interés en lo que el nuevo candidato tiene que decir, lo que a su vez podría involucrar al electorado de una manera que la versión previa al debate de esta campaña simplemente no lo hizo.
Pero antes de llegar a este reinicio de la campaña, los Demócratas tienen que descubrir cómo lucirá su boleta y, lo que es más importante, cuán rápido pueden seleccionar y certificar a su candidato.
Hasta el momento de escribir esto, mis fuentes me indican que prácticamente las únicas personas que aún intentan racionalizar la permanencia de Biden en esta carrera comparten el apellido Biden, con la posible excepción del estratega político principal de Biden, Mike Donilon - quien, como guardián de los datos que llegan al escritorio del presidente, está empezando a recibir críticas junto con Biden y su familia por la posición en la que se encuentran los Demócratas.
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